domingo, 5 de octubre de 2008

El petroleo hace agua con la crisis estadounidense

Tras la ya reconocida crisis que se vive en Estados Unidos, las consecuencias se perciben en varios países y en cada uno de una manera más dramática. Las empresas, se han visto en la obligación de disminuir el número de sus trabajadores, dejando centenares de nuevos cesantes, los que además se enfrentan, con las nuevas alzas en los precios de diferentes productos. Con esto la crisis deja efectos que se piensa perdurarán en el tiempo.

Tal es el alza de los combustible, que en Chile los gremios de pequeños y medianos empresarios hicieron un llamado la Presidenta de la República a utilizar la facultad del Gobierno de cambiar el mecanismo de operación del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles, Fepco, por la notable diferencia los precios internacionales del crudo y los precios nacionales.

El Fepco, ha mantenido un alza ficticia en los precios como una forma de resguardo según su modo de cálculo, pero esto para las entidades agrupadas en el Consejo Nacional de la Pequeña y Mediana Empresa, Conapyme, es innecesario, ya que están produciendo bajas en los costos de las empresas de menor tamaño.

"Es claro que el Fondo, como está funcionando, no tiene el efecto de colchón o amortiguador que se necesita en momentos de crisis. No puede ser que mientras el petróleo sigue cayendo en el mundo y ya va en 96 dólares, en Chile los precios internos son equivalentes a que tuviera un costo por sobre los 140 dólares. Eso es absurdo, nadie puede ser tan ciego como para mantener una situación así. No sé qué pretende la autoridad, si ya estamos en crisis", declaró para el diario La Segunda, el vicepresidente de Conapyme, Juan Araya, quien también dirige la Confederación de Dueños de Camiones.

Pero esto no es todo, para varios piases de Ibero América, la situación es peor. En México los efectos se perciben de manera importante, en rubros como las cargas provenientes de Estados Unidos, la exportación de vehículos, el sector maquinador, los precios del petróleo y en la misma reforma del Estado, según lo que aseguró la académica del Instituto de Investigaciones Económicas (IIE) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Alicia Girón González.

En Venezuela, por su parte, El presidente de la Bolsa de Caracas, Víctor Flores, aseguró que "no hay razones para preocuparnos por un coletazo financiero, para nada", aseguró en declaraciones a ABN, que contrastan con las advertencias hechas desde otros sectores sobre la vulnerabilidad económica del país.

Además nos encontramos con que la economía latinoamericana vive su sexto año consecutivo de crecimiento, gracias a la fuerte demanda de exportaciones como el cobre, el petróleo y la soja. La mayoría de los países ha usado la calma para fortalecer las reservas extranjeras. Como ha sido el caso de Brasil y México, la primera y segunda economía de la región, respectivamente, que además tienen superávit fiscal. Si bien esto no les otorga inmunidad, les ha ayudado a librarse del caos que vivió en crisis pasadas, que acabaron con devaluaciones, congelación de las cuentas bancarias e hiperinflación.

La influencia de la crisis en el petróleo

Frente a la gran crisis mundial que se vive, factores como la disminución de las reservas y su alta demanda en contraparte, nos enseñan que este elemento se nos hace cada vez más fundamental, no sólo como combustible sino como un participe de los conflictos capitalistas que existen entre el imperio estadounidense y los mayores productores de petróleo.

En lo que respecta a elementos que nos proporcionen energía, como el gas y el petróleo, estos son los que nos entregan las fuentes de producción, elaboración, y transporte, es por esto que ante esta crisis y la consecuente alza de su valor, se provoca un retroceso en la economía y una disminución del consumo.
Esto trae consigo problemas como la reducción de la producción, el agotamiento de las reservas (lo que ayuda al alza de precios) y el fracaso de los biocombustibles (principalmente etanol).
Esta posibilidad de agotamiento a corto plazo del combustible que mueve a la economía mundial y que conforma el soporte estratégico de la estabilidad de las potencias capitalistas, apresuran a su vez distintas hipótesis y especulaciones sobre el petróleo como detonante de conflictos geopolíticos-militares.

Cifras
• El déficit del 25% de su consumo energético equivale a unos 12 millones de barriles diarios de petróleo y gas, que tiene que importar, principalmente de Venezuela y Medio Oriente.

• Según varios informes, las grandes potencias mundiales ( que son las que controlan gobiernos y recursos a escala global) tienen un déficit cercano a los 40 millones de barriles diarios de hidrocarburos.

• La producción actual está en unos 85 millones de barriles al día, según el Journal.

Finalmente se pronostica que para el 2020 éste déficit sobrepasará los 100 millones de barriles diarios, ya que ningún país cuenta con reservas para mas allá del 2015, inclusive algunos pronostican que ni siquiera alcanzaran el 2012

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